En el mundo del Internet las infografías representan imágenes con un poderoso magnetismo para llamar la atención de las personas. Su estilo, su diseño y la simplicidad de la información contenida las convierten en un tipo de contenido que puede volverse viral en cuestión de minutos.
Y el triunfo de su viralidad es más que comprensible, si se tiene en cuenta que representa un resumen dotado de imágenes concretas que exponen a la perfección un tema. Actualmente son muy usadas para explicar noticias o situaciones políticas recientes.
Un ejemplo de ello, son las series de infografías que se han venido publicado desde el año 2015, que dan una radiografía de la situación de la guerra en Siria y el impacto de los grupos terroristas de Medio Oriente.
¿En qué se distinguen las infografías?
Los pioneros en el uso de infografías fueron los diarios de las agencias periodísticas. Se necesitaba de una imagen, que tal como lo dice el refrán, valiera más que mil palabras. A dicha imagen se le aderezaba con pequeños textos provistos de una enorme claridad conceptual.
De este modo, cuando el lector se encontraba con la infografía, lo más cautivante era lo sugestivo que representaba la imagen, lo que lo motivaba a seguir una lectura de los recuadros de textos. Dicho de otro modo, es ante todo un resumen preciso, provisto de imágenes sustanciales.
En lo referente al diseño de una infografía, se distingue porque no se encuentran saturadas de imágenes y mucho menos de texto. Los colores que definen a la infografía también deben mantener un adecuado equilibrio.
Una pequeña obra de arte
A la larga este tipo de formato terminará por convertirse en una autentica obra de arte, lo suficientemente elegante para que las personas accedan a compartirla, tanto por su belleza técnica como por su riqueza conceptual.
Pero por supuesto, el concepto de la infografía se volvió aun más amplio cuando las grandes empresas también las aprovecharon para dar a conocer sus productos. Así que hoy en día, el uso de este recurso es realmente amplio, siendo esencialmente para explicar con sencillez todo tipo de información.
Cómo crear tu propia infografía
Lo primero que tienes que considerar es el tema. Lo más importante es conocerlo a fondo, tener una idea clara de todo lo que quieres decir, tanto, que a medida que analices cada dato, sabrás de inmediato qué tipo de imágenes necesitas.
Dentro de este mismo planteamiento tienes que designar el tono con que vas a exponer tu idea: ya sea con tintes de humor, una seriedad total, o bien, con un estilo informativo.
Cuando tengas la certeza de lo que quieres decir con exactitud en la infografía, entonces redacta en pequeños textos las ideas centrales. Por lo general, busca que no sean demasiados los bloques de texto que vas agregar, para evitar saturarla de información.
Si la infografía tiene un tamaño de una hoja tamaño carta, entonces todo el contenido textual puede tener un aproximado máximo de 350 palabras, las cuales se dividirían idóneamente en 6 bloques de 50-60 palabras.
De hecho, a veces solo necesitarás escribir pequeñas líneas de hasta 10 palabras para reforzar la idea. A medida que haces esta tarea, diseña a papel y lápiz un boceto de lo que esperas del resultado final.
Dándole vida a la imagen
Es muy sencillo, a continuación te dejamos algunos lugares en donde solo en cuestión de minutos tendrás tu propia infografía.
Se trata de plataformas como Canva, ChartsBin, Dipity o Easel.ly: sitios web en los que puedes subir toda la información que previamente te has planteado, para así utilizar las imágenes correctas y hacer uso de los recuadros perfectos para que tenga todo lo que estás buscando.
Además, estas plataformas, como muchas más que existen en la red, tienen la virtud de facilitar enormemente el trabajo, así que si ya tienes una idea clara de cómo será tu infografía, estas herramientas gratuitas (y de muy fácil manejo) te ayudarán a concretarla.
Acerca del Autor:
Jorge Tamayo
Director de Marketing en diversos negocios y creador de Web Marketing Tips. Ha estado involucrado en la industria del Internet Marketing a partir del año 2000, desde entonces ha visto desarrollar y evolucionar el Web Marketing, comenzando en los tiempos del Search Marketing hasta lo que es ahora, y nos referimos como Marketing Digital.